La Corte Suprema ratificó la sentencia que declara que la Diócesis de Villarrica debe dar término a un contrato de arrendamiento de tierras indígenas de la comuna de Panguipulli, el que para usarlo, hicieron un pago único de 70 mil pesos.
El fallo de la Corte Suprema establece que deben restituir 13 hectáreas de terreno a una familia mapuche de Neltume, en la comuna de Panguipulli, a pesar de que la Diócesis de Villarrica apelara a un error de derecho para invalidar la sentencia.
La Diócesis de Villarrica mantenía un contrato desde 1989, donde se establecía un contrato de arriendo por 99 años con un pago único de 70 mil pesos por el periodo total de uso, que incluso, tenía una promesa de venta que se haría efectiva al pasar 20 años, y que estaría pagada con el mismo dinero utilizado para el alquiler.
“Se declara terminado el contrato de arrendamiento y promesa de venta celebrado con fecha 15 de febrero de 1989 entre el Vicariato Apostólico de La Araucanía y don Pedro Alfonso Antimilla Llancafilo, sobre un retazo de la hijuela número 180, de una superficie de 1,0375 hectáreas, cuyos deslindes especiales son: NORTE, estero Collico; SUR, estero el Tralco; ESTE, Camino publico Panguipulli a Coñaripe; OESTE, Misión de Coñaripe del Vicariato Apostólico de la Araucanía”, indica el fallo.